La Oficina Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés), dijo que en septiembre pasado la inflación en el rubro de alimentos cayó 0,2 puntos porcentuales en América Latina y el Caribe, alcanzando 8,9%, mientras que la inflación general se mantiene estable en 7%, pero sigue siendo su punto más alto del año.
La publicación trimestral de la FAO, sobre la situación y las perspectivas de la seguridad alimentaria y nutricional en la región, señala que en el último trimestre (julio a septiembre) tanto la inflación alimentaria y general de la región se han estabilizado.
Este fenómeno coincide con la reducción de precios domésticos del maíz y del fréjol en Centroamérica, y la estabilización de los precios de la harina de trigo y el maíz en América del Sur.
Sin embargo, los alimentos siguen representando más del 30 % de la inflación general: el tomate y las carnes, fueron los alimentos con la mayor incidencia en la inflación mensual de septiembre, por segundo mes consecutivo.